Oscar Andrade Espinoza
Hace cinco años, Maracaibo podía ufanarse. Contar con un inmejorable servicio de energía eléctrica la hacía atractiva para las inversiones. El comercio ha crecido de manera exponencial desde entonces y prueba de ello es el surgimiento de malls como Sambil y el Delicias Plaza.
Desde el 2008 hasta el presente, se han producido infinidad de fallas en el servicio eléctrico, en la tierra del sol amada.
Entre septiembre y noviembre del presente año, ha habido al menos 20 apagones en la capital zuliana, con un promedio de dos horas cada uno, sin que se vislumbren salidas para solventar la situación.
Se pudo conocer que una de las plantas de Termozulia está averiada, lo que aunado a la deficiencia de transmisión, por la escasez de agua en la Hidroeléctrica de Guri (estado Bolívar, al sureste de Venezuela), agrava el contexto para las comunidades zulianas, que al occidente del país solo esperan una solución. ¿Es mucho pedir?, señores de ENELVEN.
Se pudo conocer que una de las plantas de Termozulia está averiada, lo que aunado a la deficiencia de transmisión, por la escasez de agua en la Hidroeléctrica de Guri (estado Bolívar, al sureste de Venezuela), agrava el contexto para las comunidades zulianas, que al occidente del país solo esperan una solución. ¿Es mucho pedir?, señores de ENELVEN.
No hay comentarios:
Publicar un comentario