CABIMAS SIN PLAZA BOLÍVAR

Oscar Andrade Espinoza

Grandes ciudades, pequeños pueblos y alguna que otra parroquia la tienen. Espacios con bancos para tomar asiento, árboles, alumbrado público y la infaltable estatua de El Libertador.

En la Costa Oriental del Lago, cuna del petróleo, mineral que ha aportado, desde el siglo XX la riqueza del país, hay una ciudad que merece estar en el sitial de honor. Pero ni siquiera cuenta con una plaza Bolívar.

Parece mentira, pero en Cabimas han transcurrido más de tres años desde que se suspendió la remodelación de lo que se conoció últimamente como Parque Bolívar.

Debido a denuncias ante el Instituto de Patrimonio Cultural contra las autoridades ambientales regionales de la época, que abarcaban entre otras cosas la tala de árboles y aplicación de un diseño no cónsono con el medio ambiente, desde Tribunales se ordenó paralizar la obra hasta el presente.

Luego de tres años, lo único que se ha escuchado, desde los predios de la alcaldía cabimense, es que se proyecta la reconstrucción de la plaza Bolívar, dividiéndola en cuatro: las plazas Bolívar y Las Cabimas, frente a la avenida Principal, y las plazas de la Ciudadanía y del Petróleo, en la sección posterior. Sin embargo, todo ha quedado en proyectos y en la espera de la decisión del Tribunal, para que se dé luz verde a los trabajos y de una vez por todas se restaure la Plaza Bolívar, Parque Bolívar o como quiera que se llame.

Los nativos y habitantes de Cabimas merecen su plaza mayor y exigen a las autoridades que se pongan las pilas, para que se reinicien los trabajos y evitar que siga creciendo el monte, se propaguen alimañas y animales ponzoñosos y continúen antisociales haciendo de la suya, en ese recinto y en las cercanías.

Así está la plaza Bolívar en Cabimas