Cómo se lavaban la cabeza hace más de ochenta años?
Por: Oscar Andrade Espinoza
En los años veintes, nadie se imaginaba que llegaríamos a usar, años después, dos cosas: una, para la higiene personal, después del baño; la otra, para lavarse la cabeza.
En los años veintes, nadie se imaginaba que llegaríamos a usar, años después, dos cosas: una, para la higiene personal, después del baño; la otra, para lavarse la cabeza.
En aquellos tiempos, a pocos años de finalizada la primera guerra mundial, en pleno gobierno de Juan Vicente Gómez y escasos años antes de la Gran Depresión de 1929 (aunque la crisis actual como que es peor), nadie sabía de la existencia del papel higiénico.
Para ese momento, cuando a Gómez se le alzaron muchos estudiantes, entre ellos Jóvito Villalba, Rómulo Betancourt, Raúl Leoni y Miguel Otero Silva, ¿quién iba a pensar que en el baño se encontrarían un dispositivo enrollado para la higiene personal, una vez que el ser humano alivie su estómago?.
Mucho menos, las damas preocupadas por su aseo personal, pensaban en usar un líquido que poco tiempo después sería llamado champú, para lavarse el cabello.
Por los años treintas comenzaron a aparecer ambos productos en el mercado. A Venezuela llegaron más tarde. Mientras tanto, quienes debían asearse en el baño debían utilizar la tusa.
¿Qué es la tusa?. No es otra cosa que la mazorca de maíz pelada. Cada humano con mucha necesidad de ensuciar debía procurar la higiene íntima y la tusa era eficaz para la limpieza de la parte final de la espalda...
¿Y cómo se lavaban la cabeza en aquellos tiempos?. Con jabón o con preparados de hierbas.
Durante el presente siglo, tiempo después de haber llegado el champú y el papel higiénico a Venezuela, muchos quisieran volver al pasado, cuando uno se limpiaba con la tusa o utilizaba hierbas para lavarse el cabello. ¿Por qué?. Porque el champú se consigue ahora a veinte bolívares fuertes (20 mil de los viejos) y el papel sanitario oscila entre los diez y los quince bolívares. Baratísimo...
Para ese momento, cuando a Gómez se le alzaron muchos estudiantes, entre ellos Jóvito Villalba, Rómulo Betancourt, Raúl Leoni y Miguel Otero Silva, ¿quién iba a pensar que en el baño se encontrarían un dispositivo enrollado para la higiene personal, una vez que el ser humano alivie su estómago?.
Mucho menos, las damas preocupadas por su aseo personal, pensaban en usar un líquido que poco tiempo después sería llamado champú, para lavarse el cabello.
Por los años treintas comenzaron a aparecer ambos productos en el mercado. A Venezuela llegaron más tarde. Mientras tanto, quienes debían asearse en el baño debían utilizar la tusa.
¿Qué es la tusa?. No es otra cosa que la mazorca de maíz pelada. Cada humano con mucha necesidad de ensuciar debía procurar la higiene íntima y la tusa era eficaz para la limpieza de la parte final de la espalda...
¿Y cómo se lavaban la cabeza en aquellos tiempos?. Con jabón o con preparados de hierbas.
Durante el presente siglo, tiempo después de haber llegado el champú y el papel higiénico a Venezuela, muchos quisieran volver al pasado, cuando uno se limpiaba con la tusa o utilizaba hierbas para lavarse el cabello. ¿Por qué?. Porque el champú se consigue ahora a veinte bolívares fuertes (20 mil de los viejos) y el papel sanitario oscila entre los diez y los quince bolívares. Baratísimo...
MÍRELOS BIEN, porque están tan baratos que podría olvidarlos de tanto usarlos...
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